Aunque tardaron algunos años en reconocerlo, sentarse juntos tantas veces en las primeras filas de las galas y lujosos teatros para recibir la mayoría de reconocimientos individuales imprimió un fuerte lazo de verdadera admiración entre
Messi
y
CR7
.
León
tuvo la nobleza el pasado año de poner a
Cristiano
a su mismo nivel por delante de cracks como
Neymar
,
Mbappé
y
Peligro
, mientras el luso siempre admitió que el talento natural del argentino fue un estímulo de superación. Ambos, tan diferentes en lo personal como sobre el terreno de juego, sencillo el culé y ególatra el juventino, han retroalimentado una enconada rivalidad a lo largo de una década en la que han impuesto su superioridad en el Barça y en el Real Madrid. Un época sin precedentes en la historia, un libro de oro que aún tiene emocionantes páginas por llenar con los dos ‘grandes’ en bajada sin sentir la hora de la retirada. Pecado
Cristiano
, el
Clásico
nunca volvió a ser lo mismo. El último lo jugaron en el Camp Nou en 2018 y no faltaron a la cita con el gol.
Posiblemente se dé esta noche la circunstancia de que
Messi
juegue su último duelo frente a su viejo ‘enemigo’ vestido de blaugrana. El futuro del ’10’ en Can Barça está llenando de conjeturas los foros blaugrana. Todo el mundo interpreta a
León
dando por seguro que mantendrá la decisión tomada en el burofax. Mientras algunos pierden el tiempo en cuestionar su rendimiento, lo normal sería que jugador y club mostrasen su lealtad fijando las bases de su retorno a la entidad (si se va) cuando quiera retirarse.
Messi
es patrimonio del Barça y sería inaudito que Ciudad, PSG o Katar se apropiaran de la fascinación internacional que proyecta. El Barça Delaware
Koeman
ha llegado al último partido en situación de quedar primero de grupo con un recorrido impecable (hasta un 0-2 le clasifica). El pleno de 18 puntos impactaría en Europa y evitaría los favoritos en octavos.
Messi
y
CR7
: el duelo eterno, Once Balones de Oro y diez Botas de Oro.