Los expedientes abiertos de Hugo Viana en el Manchester CIty
Hugo Viana llegará a Manchester con la maleta cargada de ilusión y una amplia lista de asuntos pendientes para trabajar. El sustituto de Txiki Begiristain en la dirección deportiva del City empezará a trabajar para su nuevo club a partir del 31 de enero, cuando se cierra la ventana de transferencias invernales. Hasta entonces, Viana está centrado en el Sporting CP, que lucha por revalidar el título liguero y hacer un digno papel en la Champions League.
Desde Manchester, sin embargo, empiezan a ponerle deberes al portugués, que deberá resolver varios temas delicados. Empezando por la continuidad o no de Pep Guardiola en el banquillo del Etihad Stadium. De momento, Txiki será el encargado de negociar con el técnico de Santpedor, aunque todo parece indicar que la renovación del catalán es una carpeta espinosa y que se acabará decidiendo en los últimos meses de competición. Ahí entrará en escena Viana, que tratará de convencer a Guardiola que la mejor opción es continuar en la disciplina ‘sky blue’. Si no tiene éxito, el luso se guarda un plan B en la mochila: Rúben Amorim, actual preparador de los ‘leones’.
Vacas sagradas
En cuanto a la plantilla del próximo curso, las exigencias de la Premier League obligará al Manchester City a hacer una progresiva renovación. Futbolistas como De Bruyne, Gündogan, Ederson, Kovacic o Bernardo Silva están en la recta final de sus carreras y se peina el mercado por jugadores que puedan suplir figuras de esta talla mundial. El caso del belga es especialmente delicado, ya que en varias ocasiones ha dejado entrever que podría buscar un último contrato multimillonario en un país exótico. Por lo que su marcha parece más que meditada.
Hugo Viana, director deportivo del Sporting / X
Compaginará dos cargos
Otra de las carpetas que estará sobre la mesa de Hugo Viana es la renovación de Kyle Walker, que acaba contrato en 2026 y tiene a Rico Lewis, de 19 años, apretándole las tuercas. Y por último qué hacer con jugadores que no han rendido al nivel esperado, como es el caso de Kalvin Phillips o Matheus Nunes. El director deportivo tiene faena por delante y tendrá poco tiempo para ponerse manos a la obra. A partir de febrero deberá ir delegando en su sustituto en el Sporting CP y asumiendo varias negociaciones en el Manchester City. El móvil del luso echará humo.
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