La renovación de Musiala, en el aire: “Es difícil, pero no imposible”
La renovación de Jamal Musiala con el Bayern de Múnich es uno de los principales dolores de cabeza del equipo bávaro estos tiempos. La estrella alemana, que termina contrato en 2026, sigue sin tener decidido su futuro más inmediato por ahora, una situación que preocupa cada vez más a un equipo que tiene previsto construir su futuro en base al mediapunta.
El asunto no se está evitando por parte del Bayern de Múnich, que está intentando ser transparente dentro de las posibilidades en cuanto al estado de las negociaciones con su jugador. Max Eberl, director deportivo de la entidad bávara, ha sido ahora quien se ha encargado de actualizar la situación con Musiala en una entrevista con Sport1 donde ha repasado, además, el perfecto arranque liguero del equipo.
Una renovación complicada
No es ningún secreto que el Bayern de Múnich está intentando hacer todo lo posible para que su estrella amplíe su vinculación con el equipo más allá de 2026: “Por supuesto que queremos ampliar el contrato de Jamal. Las conversaciones ya están en marcha y ahora se intensificarán“, ha reconocido el directo deportivo. Sin embargo, Max Eberl admite dificultades en la negociación: “Es difícil, pero no imposible, porque Jamal sabe lo que tiene en el Bayern. Creció aquí, obtuvo sus primeros créditos y llegó a este nivel”, explica.
El jugador está valorando qué opciones puede tener en un futuro mientras el Bayern intenta convencer con base en su proyecto deportivo: “Nosotros, como club, somos extremadamente ambiciosos. Él lo sabe y quiere ganar títulos. Sin embargo, si Jamal quiere irse a otro lugar en 2026, entonces se encontrará una solución“, reconoce. Sea como fuese, desde el club bávaro descartan una renovación con cláusula de salida: “Esto sería muy inusual para el Bayern de Múnich. En su antiguo club, el Gladbach, esto era “casi lógico, pero el Bayern es un club muy grande”.
El mediapunta sigue deshojando la margarita de su futuro mientras la fecha límite de su contrato se acerca de manera implacable. El jugador será libre de negociar con cualquier club en poco más de un año, una situación que el Bayern quiere evitar a toda costa con una renovación a la altura de su talento. Hay tiempo, aunque este corre en su contra.
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