Amañar partidos de fútbol para obtener un beneficio económico o por un interés deportivo es un delito grave. Cada vez está más perseguido, no solo por la policía, sino también por los organismos deportivos, los más interesados en velar por la integridad de la competición. Las tentaciones son muy suculentas pero en la lucha contra el fraude LaLiga ha implementado la mejor herramienta tecnológica: Tyche 3.0
Parece ciencia ficción, pero es una auténtica realidad. A través de algoritmos de aprendizaje automático e inteligencia artificial, Tyche 3.0 monitoriza en tiempo real todos los partidos que se juegan en LaLiga Santander y LaLiga SmartBank, pero también de la Segunda División B, la Tercera, la Primera Iberdrola, la Liga Nacional de Fútbol Sala y otras competiciones.
Dentro de LaLiga, la coordinación es fundamental. Por eso hace años que las áreas de Integridad y de Business Intelligence & Analytics trabajan codo con codo con un único objetivo: destapar los casos de corrupción del fútbol español.
El software de Tyche 3.0 posee una gran base de datos históricos de partidos jugados en temporadas anteriores. Con esta información, el sistema puede generar sus propias estadísticas y previsiones, que permiten anticipar qué cuotas van a fijar las casas de apuestas. Así, antes de un partido -y especialmente durante su transcurso-, compara sus predicciones con las cuotas que han puesto alrededor de una veintena de casas de apuestas. Casi siempre coinciden, y el margen de error es muy pequeño.
Tyche 3.0 predice las cuotas que van a poner las casas de apuestas. Si hay alguna cuota que se dispara o se desploma sin motivo aparente, el sistema da la voz de alarma.
Las alarmas saltan cuando una cuota de una casa de apuestas sube o baja de forma muy marcada y sin motivo aparente que lo justifique. Es entonces cuando el programa detecta la anomalía y lo notifica al analista, quien deberá investigar el porqué del desfase. Rafael Zambrano, científico de datos de LaLiga, aclara que “la herramienta puede detectar algún falso positivo, pero también es lo que buscamos: es la forma que tienen los algoritmos de no dejarse ningún caso”.
La sospecha empieza a brotar cuando el analista no identifica qué ha pasado y opta por escalar el caso a un responsable, quien a su vez decidirá si debe comunicarlo a la Policía oa la Dirección General de Organización del Juego. Alguien podría recibir compinchado con algún jugador e incluso con un grupo organizado para alterar un resultado y beneficiarse de las apuestas. Cabe recordar que este año, los incentivos por ganar un partido -los famosos maletines- también son delito.
Cuando hay muchos partidos disputándose al mismo tiempo, el sistema de monitorización es capaz de analizar hasta 100.000 eventos por minuto. Se entiende por evento cualquier situación sobre la que se pueda apostar: goles, córneres, faltas, tarjetas, etcétera. En la temporada 2018-19 se abrieron 15 investigaciones por alertas automáticas del programa, todas ellas por anomalías en el mercado de apuestas de categorías no profesionales.
Desde el Área de Integridad de LaLiga vigilan también lo que pueda pasar en los campos. Para ello, envían “oficiales de integridad” a los partidos para detectar comportamientos que alteren el juego limpio y, en su caso, reportarlos. En caso de que Tyche 3.0 haya detectado algo parejo en el mismo partido, se usarán ambas informaciones en la investigación. Iñaki Arbea, responsable del Área de Integridad, explica que “los oficiales de integridad son los ojos de Tyche 3.0 en el campo”.
El fútbol español es de los más limpios del mundo, especialmente desde la llegada de los sistemas de detección y la mayoría de los casos se observan en las categorías no profesionales. El año pasado se monitorizaron 6.495 partidos. Ni los juveniles ni los amistosos escapan del control de Tyche 3.0. Todo lo que aparece en el mercado de apuestas se monitoriza.
De hecho, LaLiga es la única competición del mundo que posee un sistema de monitorización avanzado en tiempo real. El objetivo final es que el aficionado pueda disfrutar de juego limpio en todos los partidos que vea y disfrute de uno de los mayores espectáculos del planeta sin alteraciones ni engaños. Mirando al horizonte, se espera que en los próximos años otros deportes puedan beneficiarse del poder de monitorización de Tyche 3.0. Incluso otros países se han interesado ya por este sistema pionero.