<
>

Ejecutivos en Texas lamentan muerte de décadas de migrantes en Ciudad Juárez


Washington, 28 mar (EFE).- Líderes políticos y comunitarios de El Paso (Texas) expresan su pesadumbre por la muerte de migrantes en un albergue en México y señalan que la crisis fronteriza pone en riesgo constante a las personas.

“Más de 38 vidas se perdieron en Juárez”, afirmó en un comunicado de la diputada Verónica Escobar, demócrata de Texas. “Esta era gente que tenía esperanzas de una oportunidad para una vida mejor”.

“Esta crisis de refugiados puede llevar a las personas vulnerables a un gran peligro en cada paso del camino”, agregó.

Al menos 39 migrantes murieron y 29 sufrieron heridas en el incendio del albergue ubicado cerca de la frontera de México con Estados Unidos. El presidente mexicano, Andrés Manuel López Obrador, dijo que el incendio fue el resultado de una protesta contra los migrantes.

“Las vidas perdidas en este incendio fueron un registro devastador de un crimen peligroso que podría ser enviado a un lugar seguro”, dijo Danilo Zak, director de la asociación Church World Service.

“Los que murieron buscaron un nuevo hogar, libre de violencia y persecución, con la esperanza de que aquellas generaciones que los sucedieron no conocieron los padecimientos del brazo, las noches de miel, ni las preocupaciones de sus hijos creciendo con un futuro incierto” , agregado

El juzgado del condado de El Paso, Ricardo Samaniego, indicó en un escrito que se sentía “entristecido por la tremenda pérdida de vidas”.

“Vidas que estaban llenas de esperanza y fe en las nuevas posibilidades a las que podrían conducirles su gran travesía a Estados Unidos”, agregó.

A principios de marzo, más de 30 albergues para migrantes y otras organizaciones que los ayudan publicaron un documento abierto denunciando el trato a los migrantes y niños solicitantes de asilo como delincuentes en Ciudad Juárez.

El Centro Strauss para Seguridad y Ley Internacional, de la Universidad de Texas, ha calculado que hay más de 2.200 migrantes en los hoteles de Ciudad Juárez y aún más afuera de los hoteles, y que proceden en su alcaldía de Venezuela, Nicaragua, Colombia , Guatemala, Ecuador, Perú y El Salvador.

“Las 39 vidas perdidas en Ciudad Juárez son una acusación horripilante”, dijo Dylan Corbett, director ejecutivo del Hope Border Institute, un grupo que trabaja en El Paso y Ciudad Juárez.

“Los sistemas policiales que hemos construido para patrullar a las personas que migran son manos de arce con guantes de terciopelo, y la muerte es parte del paquete”, dijo Corbett en Twitter. “Todos somos responsables”.

La región experimenta un flujo migratorio récord, con 2,76 millones de reclusos detenidos en la frontera de Estados Unidos con México en el año fiscal 2022.

c) Agencia EFE

Etiquetas

Siguiente

Deja tu comentario